1. ELECCIÓN DEL TEMA A TRATAR
El tema sobre el que versará el
trabajo monográfico suele proceder de las inquietudes del propio investigador,
pero puede también ser sugerido o impuesto por el docente que se lo encarga a
un alumno o por el cliente que lo requiere a un equipo de investigación.
El tema tiene siempre una amplitud
mayor que la que puede abarcar el trabajo de investigación. Por eso el paso
siguiente consistirá en recortar el tema, para limitarlo a las cuestiones
específicas de las que nuestro trabajo dará cuenta. De todos modos, y antes de
recortar el tema, es de suma importancia adentrarse en él consultando
bibliografía general.
Por ejemplo, si pienso realizar un
trabajo de investigación sobre Karl Marx sería conveniente que consulte
alguna enciclopedia o alguna Historia del Pensamiento para informarme sobre su
vida y sus obras. Podría dar una lectura rápida al Manifiesto del Partido Comunista,
si es que se encuentra a mi alcance. También podría leer sobre los movimientos
socialistas en Europa en la segunda mitad del siglo XIX y sobre las
revoluciones comunistas del siglo XX.
Siempre es de utilidad consultar
los apuntes de las materias que ya hemos cursado y rendido en las que se
trataba directa o tangencialmente este tema.
2. RECORTE DEL TEMA
Según sean las exigencias, el
material con que se cuenta, el tiempo de que se dispone y la propia capacidad,
ha de recortarse el tema de modo de precisar claramente qué preguntas se
tratará de responder.
Es de suma importancia que el
recorte se realice bien. Si el trabajo es demasiado amplio, perderá
profundidad. Si es demasiado acotado, será excesivamente sencillo y breve o, si
es extenso, se perderá en la reflexión de aspectos irrelevantes. Cabe también
la posibilidad de que, sin ser ni demasiado abarcativo ni demasiado exiguo, el
recorte falle al delimitar una temática de escaso valor dentro del tema
general.
El recorte del tema debe quedar
explicitado en el propio título del trabajo monográfico. En un trabajo de
investigación, no se debe hacer uso de un título indirecto o poético. "El
nombre de la rosa", título tan bueno para una novela, sólo serviría para
una monografía que tratase sobre el nombre científico de esta flor o sobre la
etimología de la palabra "rosa".
Siguiendo con el ejemplo de Marx,
si él era nuestro tema, el recorte podría hacerse en base a una etapa de su
vida (por ejemplo, sus años de estudio en Berlín); a alguno/s de sus escritos (por
ejemplo, los escritos de juventud); a una de sus ideas centrales (por ejemplo,
crítica de la religión); etc. Y esto debería reflejarse en el título del
trabajo: "Marx en Berlín", o "Los escritos del joven Marx",
o "Marx, crítico de la religión".
3. BÚSQUEDA DEL
MATERIAL DE REFERENCIA
Antes de comenzar la investigación propiamente
dicha, tenemos que determinar con precisión a qué material referido al tema
tendremos acceso. Si no contamos con el mínimo indispensable tendremos que
desistir de nuestra intención de llevar el trabajo adelante.
Podemos clasificar al material de referencia en fuentes
y autores. Llamamos fuentes a los textos que se relacionan
directamente, de primera mano, con nuestro tema. Si realizamos una
investigación sobre Kant consideraremos "fuente" a cualquier
escrito que provenga directamente de ese autor (ya sea un libro, carta,
etc.). Llamaremos "autores" al resto del material que, si bien
habla sobre el autor, no procede directamente de él (por ejemplo, alguna
Historia de la Filosofía). Por supuesto, el material de fuentes es el más
importante y pierde profundidad y seriedad un trabajo en el cual, pudiendo
recurrirse a fuentes, sólo se recurre a autores.
En las tesis de licenciatura y, con más razón, en
las doctorales, es indispensable haber accedido a toda la bibliografía de
importancia publicada sobre el tema a tratar, ya que se trata de hacer
investigación de punta. No es tan rígida esta exigencia en las monografías
realizadas en la carrera de Profesorado, ya que allí cuenta más la exposición
sintética y didáctica y puede admitirse que un trabajo que reúna esas
características se realice sin un riguroso "rastrillaje" de todo lo
publicado hasta hoy sobre el tema.
A la hora de buscar material de referencia, resulta
muy útil visitar las bibliotecas y recorrer sus ficheros, tanto temáticos
como de autores. También podemos buscar material en Internet, a través de los
buscadores, centros de información, almacenes de trabajos y resúmenes. En
muchos de ellos se puede solicitar un artículo o capítulo determinado, el
cual es enviado por medios electrónicos o por correo. En las enciclopedias y
diccionarios especializados suelen aparecer referencias muy valiosas. También
recorrer las librerías puede ser un modo alternativo de tomar contacto con
material al que podremos tener acceso y enterarnos de lo que sobre nuestro
tema se está leyendo hoy.
4. FICHAJE
El fichaje es una técnica utilizada especialmente
por los investigadores. Es un modo de recolectar y almacenar información.
Cada ficha contiene una información que, más allá de su extensión, le da
unidad y valor propio.
Las fichas tradicionales son de cartulina y se
venden en las librerías a un precio muy accesible. Sin embargo, hoy es muy
común recolectar la información en una base de datos. Llegado el caso, se
puede imprimir la información así acumulada con el formato de la ficha
tradicional y con la prolijidad propia de las impresoras.
Hay distintos tipos de fichas:
·
De resumen: contienen el resumen de un libro completo, de un
capítulo, o de un apartado de un libro.
·
De síntesis: contienen
la síntesis de un libro completo, de un capítulo, o de un apartado de un
libro.
·
De citas: contienen una afirmación textual (y no un conjunto
encadenado de afirmaciones como el resumen y la síntesis).
·
Personales: contienen una idea que se nos ha ocurrido y que
queremos conservar evitando que caiga en el olvido. No llevan la indicación
bibliográfica.
Si el fichaje se realizó correctamente, se podrá
prescindir del libro y realizar los trabajos monográficos a partir de ellas.
Para eso deben incluir todos los datos del libro que sean necesarios para
poder citarlo.
Un posible esquema para la elaboración de fichas es
el siguiente:
·
Tipo de ficha: con una
letra mayúscula se indica si se trata de una ficha de resumen (R), de
síntesis (S), de cita (C) o personal (P). En las fichas de resumen y de citas
se sobreentiende que el contenido es textual, por lo que no se colocan las
comillas.
·
Título: se aconseja darle un nombre a cada ficha que
sintetice su contenido y permita ubicarla con mayor facilidad.
·
Datos bibliográficos: la única
que no los lleva es la personal. Allí deben constar los datos del libro que
se está citando, resumiendo o sintetizando: apellido del autor; inicial de su
primer nombre seguida de punto; año de edición del libro; título del libro en
letra itálica seguido de punto; nombre de la ciudad en la que se editó
seguido de dos puntos y nombre de la editorial. Con estos datos se puede citar
el libro sin necesidad de volver a él.
·
Relación con otras fichas: si la ficha
en cuestión se relaciona por afinidad u oposición con el contenido de otra,
esto puede ser indicado para que en un futuro, al reflexionar sobre
cualquiera de ellas no se deje de tener en cuenta a la otra.
·
Número de página: como las
citas se realizan indicando el número de página, además de los datos del
libro arriba indicados, es importante que quede claro en qué página dice el
autor lo que estamos copiando. Para ello se anota el número de página en el
margen izquierdo y se indica con una doble barra oblicua (//), en el texto,
el cambio de página.
·
Contenido: aquí se coloca el resumen, la síntesis, la cita o
la idea que se nos ha ocurrido, según sea el tipo de ficha del que se trate.
Si bien esta es la parte más importante de la ficha, pierde casi todo su
valor si no se ha completado la información bibliográfica.
|
||||
5. ESBOZO DEL ESQUEMA
Antes de comenzar a redactar el informe final de la
investigación se debe bosquejar el esquema general del mismo. Éste indicará
el camino que se transitará desde la introducción hasta la conclusión,
señalando los temas que serán abordados y el orden en que se los tratará.
Este esquema se asemeja a lo que, en el informe
final, será el índice. En él se indican las partes, capítulos y secciones que
lo conformarán.
A este paso lo denominamos "esbozo" porque
el esquema se halla sometido a posibles reestructuraciones hasta que se
concluye la redacción del informe final. Es muy común que, al realizar el
esquema, notemos la necesidad de incluir una temática sobre la que hemos
recogido poca información. Ello nos obligará a reanudar la investigación y,
de no encontrar información suficiente, a plantear el informe de otra manera,
cambiando el esquema que habíamos esbozado.
Una vez que hemos realizado el primer esbozo del
esquema, podemos comenzar a redactar el informe empezando por cualquiera de
sus partes, ya que sabemos qué tratarán las anteriores y posteriores. No es
indispensable iniciar la redacción por la introducción, la cual, por otro
lado, es aconsejable escribir al final.
Hay diferentes esquematizaciones posibles. Entre
ellas señalamos:
Lineal: plantea una pregunta en la introducción y en los
capítulos que componen el cuerpo del trabajo y va tratando temas que se
ordenan lógicamente (el anterior prepara al posterior) hasta llegar a la
conclusión.
·
·
·
Contrapunto: realiza una
confrontación entre dos autores, corrientes, épocas, etc., buscando
establecer sus acuerdos y sus diferencias. En la introducción presenta a
quienes se comparará y en los capítulos siguientes realiza la confrontación,
arribando a una conclusión que sintetizan las semejanzas y diferencias
marcadas en el cuerpo del informe. El desarrollo puede hacerse por separado
(A), dedicando una primera parte a un tema y una segunda al otro, reservando
la confrontación propiamente dicha para la conclusión; o puede también
realizarse en base a subtemas (B), con lo cual en cada capítulo se abordarán
ambos autores según lo que afirman sobre el subtema tratado en ese capítulo.
·
·
·
Delta: plantea una pregunta en la introducción y en cada
uno de los capítulos realiza una aproximación diferente hacia una posible
conclusión, sin que los capítulos se ordenen los anteriores a los posteriores
y sin que guarden entre sí una relación directa. Finalmente arriba, reuniendo
los datos aportados por todos los capítulos, a una conclusión.
·
|
6.
PRIMERA REDACCIÓN
El trabajo se redactará en un
primer momento en borrador. En el caso en que la situación lo permita, lo ideal
es que este borrador sea corregido por el profesor ante quien se deberá
presentar el trabajo terminado, de modo que si tiene alguna observación que
hacer se esté a tiempo de corregirlo. Si esto no es posible, y al profesor se
le presenta directamente la redacción final, es muy conveniente recurrir a un
profesor tutor u otra persona versada en el tema que pueda realizar esa
corrección. Es conveniente que una tercera persona nos ayude a mirar el trabajo
desde fuera y revise tanto la claridad de la exposición y el contenido del
trabajo como la redacción o la ortografía.
Al redactar, es aconsejable hacer
uso de oraciones breves y párrafos que no sean ni cortos ni largos en exceso.
Cada párrafo debe tener una unidad, es decir, debe expresar y desarrollar una
idea.
7. REDACCIÓN
DEFINITIVA Y PRESENTACIÓN
La redacción definitiva se hará corrigiendo la primera redacción en base a
las observaciones realizadas por el profesor, el tutor o quien nos haya hecho
el favor de leer críticamente nuestro trabajo. No significa ello que debemos
reformar todo según el criterio del corrector, pero sí que debemos tomar sus
observaciones seriamente en cuenta y replantearnos con humildad si es necesario
realizar correcciones o reformas para mejorar la redacción y favorecer la
comprensión por parte del lector.
La presentación se hará siguiendo las convenciones exigidas por la
institución en la que se ha realizado la investigación. De todos modos, damos
aquí algunas indicaciones que pueden ser de utilidad:
·
El trabajo debe contar de las siguientes partes:
Carátula
|
Debe incluir el nombre de la institución, el de la asignatura, el del
docente, el del alumno que realiza el trabajo y la fecha de entrega.
|
Introducción
|
Presenta el informe señalando las grandes líneas de la exposición y las
fuentes en las que se ha basado el autor en su investigación.
|
Desarrollo
|
Es el cuerpo del trabajo. En él se presentan los datos relevantes
recogidos y las deducciones que a partir de ellos hemos realizado. El
desarrollo puede dividirse de distintas formas: en partes, capítulos y
secciones / en capítulos y secciones / sólo en secciones.
|
Conclusión
|
Sintetiza y expresa las afirmaciones finales a las que hemos arribado a
partir de los datos y deducciones reflejados en el cuerpo del trabajo. Debe
estar en sintonía con la introducción, respondiendo a las preguntas que en
ella se formulaban. Las respuestas no han de ser necesariamente concluyentes.
Una investigación seria puede concluir afirmando que no se cuenta con la
información suficiente como para dar una respuesta definitiva sobre el tema
en ella planteado.
|
Notas y Citas
|
Las notas (que son textos propios o citas de terceros que el autor no
considera conveniente incluir en el texto propiamente dicho) y las citas
(indicaciones bibliográficas de los textos citados en el trabajo) pueden
colocarse al pie de la página, al final de cada capítulo o al final del
trabajo. En las citas ha de indicarse el nombre del autor, el título de la
obra, (traductor), la Editorial, la ciudad, el año de edición del libro y el
número de la página de la que se ha extractado el pasaje citado.
|
Índice
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Indica la página en la que comienza cada una de las partes, capítulos y
subtítulos. Puede colocarse después de la Conclusión o antes de la
Introducción.
|
Bibliografía
|
Se debe indicar todo el material bibliográfico utilizado (libros,
artículos de revistas, sitios de Internet).
|
·
Tipo de hoja: carta
·
Tamaño de letra: 12 puntos
·
Interlineado: simple o 1,5
·
Márgenes: superior 3 cm / inferior 2
cm / izquierdo 3,5 cm / derecho 1,5 cm
·
Las hojas se numeran desde la primera (si la carátula
no está impresa sobre cartulina sino sobre una hoja común, también va numerada,
aunque el número no se escribe en ella sino que queda tácito).
·
Las hojas se escriben de un solo lado.
·
Cada parte comienza en una página
nueva, al igual que cada capítulo.
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